TEST: ¿SOY CANDIDATO PARA USAR CARILLAS DENTALES?

Cuando se tiene un problema en los dientes que puede sugerir el uso de carillas dentales es fundamental intentar conocer todos los tratamientos odontológicos posibles al respecto.

Está claro que, en ocasiones, pueden existir más de una solución a dicho inconveniente.

Sin embargo, no cualquiera de estas técnicas puede responder con exactitud a absolutamente todos los requerimientos de un paciente.

El tipo de problema dental, su gravedad, los hábitos del paciente, su historial dental, incluso su presupuesto, son todas variantes que deben tenerse en cuenta y compartirse con el dentista.

A partir de ello, el profesional podrá asesorarlo de la manera más adecuada para comprobar si efectivamente se es candidato serio a usar carillas dentales.

¿Cuándo puedo usar carillas dentales?

1. Alta pigmentación de los dientes

Cuando la dentadura presenta un tipo de coloración muy fuerte que no sólo afecta la superficie de los dientes sino también su interior, tratamientos como el blanqueamiento dental no son la opción más conveniente. En estos casos, sí es recomendable el uso de carillas dentales.

2. Desgaste y fractura de los dientes

En muchas oportunidades, la colocación de carillas dentales se presenta como una gran alternativa para solucionar problemas de desgaste, resquebrajamiento o fractura de los dientes de una persona.

3. Dientes amorfos

Aquellos pacientes que padecen problemas consistentes en dientes con una estructura o anatomía inadecuada, amorfos, son serios candidatos a utilizar carillas dentales.

4. Ligeras malposiciones de los dientes

En el caso en que los dientes neesiten ser restaurados y presenten desviaciones muy leves, el uso de carillas dentales puede corregir adecuadamente el problema para obtener una sonrisa más perfecta.

¿Cuándo no puedo usar carillas dentales?

1. Apiñamientos severos de dientes

Aquellas personas que presenten dientes apilados uno sobre otros o retenidos en los huesos por falta de espacio en la dentadura no serán aptos para poder colocarse carillas dentales.

2. Diastemas severos

A pesar de que exista la posibilidad de que las carillas dentales mejoren problemas de diastema, el uso de dichas carillas no podrá corregir totalmente estos problemas de grandes distancias entre dientes.

3. Falta de estructura dentaria en los dientes

Puede ocurrir también que haya pacientes que presenten dentaduras con poco esmalte dental. En estos casos, la utilización de carillas dentales se hace complicada porque esta carencia hace dificultoso la correcta adhesión de las láminas a la superficie de los dientes.

4. Hábitos parafuncionales severos

Las carillas dentales no son recomendables en casos donde el uso del sistema masticatorio no sea para masticar. El apretamiento o el rechinamiento de dientes y la mordedura de objetos son inconvenientes que probablemente hayan dado lugar a un determinado problema dental. Las carillas dentales al sufrir el mismo tipo de exigencias no serían una solución conveniente.

5. Salud o higiene inadecuada

Algunos pacientes pueden presentar problemas dentales previos severos o una mala higiene dental que hagan que el uso de las carillas no sea una posibilidad viable.

Clínica Dental DAS Group - Buenos Aires

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